Richard Dorson,

American Folklore en la mayoría de las oficinas. En los últimos cinco años de facultad y personal visitante como estudiante de posgrado, siempre pude detectarlo con bastante rapidez. Adornado con texto rojo brillante en un fondo negro azabache, la columna vertebral y la cubierta se destacan entre otros libros en el estante.

Curiosamente, nunca he leído el Manual de adelante hacia atrás. Sin embargo, no considero esto una falla. Este es el tipo de libro que desafía la inspección lineal. Hay sesenta y ocho capítulos cortos dentro, y eso no incluye los varios ensayos introductorios y notas principales. Es un manual en el verdadero sentido de la palabra: escrito y organizado para consulta rápida por aquellos que quieren una breve sinopsis del tipo de cosas que hacen los folcloristas, desde temas comunes de investigación hasta estrategias de publicación.

La energía de coordinación detrás del Manual fue monumental, como aprendí recientemente. Miles de documentos intercambiados entre fines de la década de 1970 y principios de la década de 1980 dan fe del trabajo que se hizo para obtener esta pieza. Esos documentos están disponibles ahora , en la última colección que estará disponible a través de University Archives and Records Management. Se invita a cualquier parte interesada a conocer el proceso, o la prueba, podría decirse, que precedió a la publicación del Manual en 1983.

Richard M. Dorson

Originalmente programado para ser una publicación de McGraw-Hill, el Manual fue confiado a Indiana University Press después de un cambio en la gestión en la empresa anterior. Con la editorial asegurada, los editores se enfrentaron al desafío de coordinar borradores, revisiones y pagos entre docenas de autores contribuyentes. En medio de estas actividades, el proyecto sufrió su mayor revés: la muerte del editor principal y lumbrera del Folklore Institute, Richard M. Dorson. Su fallecimiento el 11 de septiembre de 1981 creó un gran obstáculo en el proceso de publicación, así como un vacío en la disciplina de los estudios del folclore en general. Conocido coloquialmente como el padre de la folklorística estadounidense, la producción de Dorson incluyó 24 libros y 250 artículos. En una pieza de correspondencia incluida en esta colección, Manual El colaborador Robert C. Toll describió la gravedad de la situación: "La muerte de Dick es una gran pérdida. Es apropiado que este proyecto, que no hubiera despegado sin la fuerza de su intelecto, visión y persuasión, sea completado y publicado ".

Que el Manual descanse en tantas estanterías hoy es un testimonio de la dedicación del personal editorial restante. Sin el compromiso de la Editora Asociada Inta Gale Carpenter y las Editoras Adjuntas Elizabeth Peterson y Angela Maniak, el proyecto se habría estancado. Es una especie de decepción, entonces, que cuando finalmente se lanzó el Manual , se encontró con críticas mixtas. Por cada cumplido que recibió el volumen, también parecía soportar una crítica. En un número de 1984 de la revista Ethnomusicology , el crítico James Porter alaba los "currículos de temas de expertos realizados por profesionales consumados" del volumen, pero también señala que "este decepcionante libro podría haberse salvado, se siente, al prestar más atención a la profundidad".

Como folclorista, siento una punzada defensiva ante estas palabras, pero no es necesariamente una defensa del Manual mismo. Es más una defensa de Dorson, cuya influencia impregna la vida en el Folklore Institute incluso 33 años después de su muerte. Tal vez porque somos folcloristas y no contables o químicos, tendemos a reconocer su impacto en términos conmemorativos, casi totémicos. Cada año, dos estudiantes graduados reciben un premio en nombre de Dorson, ya sea por excelencia en la beca o para apoyar las excursiones de trabajo de campo. Del mismo modo, la Conferencia anual de folclore conmemorativo Richard M. Dorson trae a un folclorista distinguido al campus para una conferencia formal y, por lo general, una serie de charlas y reuniones informales. Dorson de seriedad también persiste fuera de la burocracia universitaria. Algunos profesores y personal han sugerido que su espíritu aún reside en el departamento donde pasó gran parte de su vida profesional.

El Manual encaja en esta mezcla como un recordatorio tangible de los logros de Dorson, y se hace más potente porque falleció antes de que se terminara. Las críticas del libro son razonables. También son probablemente proféticos, dados los recursos disciplinarios que se necesitan para escribir una reseña académica de libros como la que se cita arriba. Sin embargo, es difícil tragarse las críticas desde un punto de vista personal, porque el libro sirve como el canto de cisne de Dorson. Para bien o para mal, el ManualAcentuó una carrera durante la cual los estudios folclóricos pasaron de ser un lado intelectual a una disciplina académica viable, no en pequeña medida debido a la fuerza de voluntad de Dorson. Muchas disciplinas se benefician de eruditos casi legendarios como este. Su devoción es total, y su ambición parece no tener límites. El punto que quiero hacer aquí es simplemente que Dorson es nuestra leyenda, y este libro es su despedida.